Conviértete en el creador de tus propios milagros . . .

Entradas etiquetadas como ‘mente’

Mi país soy YO

4141670550_94c80c9d0d_zMi querido país está dividido, me pregunto si yo también lo estoy…. Pues sí, a veces me siento dividida por dos grandes emociones, el amor y el desamor, y allí englobo el dolor, el temor, la rabia y todos sus matices. Estamos en un mundo dual y la única manera de contrarrestarlo es centrarnos en nuestro corazón, encontrando el equilibrio, la paz, recordar quienes somos realmente y desligarnos de la ilusión de nuestra mente.

¿Suceden injusticias? Si en mi país suceden demasiadas injusticias, podría decir que son terribles. Entonces me pregunto si soy justa conmigo misma, si me trato con consideración o tal vez es lo opuesto,….  observo en mí desde la forma como me alimento, como cuido mi cuerpo, mis hábitos, como trato a otros seres etc. Y de repente viene a mi mente una situación donde me sentí injusta…

Sucedió con un gato, tengo ya 6, más de la cuenta para mi gusto, porque fueron llegando dos de ellos por separado, pequeñitos, buscando comida y al darles el alimento se fueron quedando . La otra gata que yo tenía hace 3 años, al no prestarle mayor atención quedó embarazada y luego tuvo cinco gatitos. Logré solo regalar a dos de ellos. En vista de esto hace tiempo tomé la decisión de no alimentar más a otros gatos que se acercaran del vecindario, que entran a la casa por el patio o el jardín del frente, a comer las sobras de mi perro. Mi numeroso grupo de gatos, menos mal que se van de paseo a otros lugares por largos períodos, y aparecen solo cuando tienen hambre, respetando un poco mi espacio.

Hoy ante la lluvia, en el patio trasero, uno de esos gatos grises aparentemente buscaba un lugar donde acobijarse; entró en la casa y apenas lo vi, lo espanté como siempre hago. Cuando este me miró, de repente sentí la injusticia, sentí como el pobre gato me miraba afligido.  Ya alimento a 6 y según mis creencias es suficiente. Este gato que siempre está escondiéndose al asecho entre las puertas y los rincones a la intemperie, observa como es marginado y solo cuando puede, sin ser visto, se apodera de alguna de las sobras. Si tal vez él pensara o pudiese hablar, me estaría diciendo…. “¿Porque a ellos sí y a mí no me das nada?”. Sentí lástima cuando corrió entre la lluvia en búsqueda de un nuevo refugio para acobijarse, pero mi decisión era firme,  NO tener más gatos. Y así me sentí: INJUSTA….sé que son creencias, como también son creencias las injusticias que veo afuera, con mis hermanos humanos, en mi país, en el mundo. Las injusticias las veo porque me siento injusta.

Mi país está dividido, hay intolerancia y también hay violencia. Me reviso y reconozco esto como una parte de mí, donde encuentro que hay días o más bien ratos que me percato de mi intolerancia cada vez menos frecuente. Si en mi experiencia veo violencia enseguida renace la violencia en mí, cuando veo una injusticia reacciono. En el tráfico, si alguien me grita, etc. Ya con la práctica y la autoobservación, me doy cuenta de ello y lo limpio, no me engancho fácilmente pero aún es parte de mi sistema de creencias.

En mi país hay escasez y pobreza, me pregunto cuántas veces no me he sentido con las ansias de comprar algo que a mi juicio me pareció costoso y no lo he hecho por la creencia de que no tengo suficiente. Ya hoy en día me doy cuenta que no necesito prácticamente nada o casi nada para ser feliz y estar en paz. Hoy en día estoy abierta a recibir porque sé que somos abundantes.  Aun así de vez en cuando se me escapa algún pensamiento, aún la mente me atrapa y siento necesidades y creo que si obtengo esto o aquello seré feliz. Luego que lo obtengo vuelvo a sentir que hay algo más que necesito y así sucesivamente ya que la felicidad aparente que consigo con el nuevo objeto desaparece hasta que consiga el próximo. La mente nos crea necesidades porque tenemos creencias y nos apegamos a las cosas materiales.

En mi país la gente sufre porque yo sufro,  me duele el fallecimiento de mi hijo que se marchó hace apenas dos meses y veo como la violencia se lleva la vida de otros seres humanos. ¡Mi país soy yo!

¿Cómo no ver en mi país aquello que ya está en mí? ¿Es el mundo que veo un reflejo de mi interior? ¿Dónde radican los cambios para ver la unión en mi país y en el mundo?

A mis queridos compatriotas les sugiero que encuentren la paz en su interior. Nuestras creencias las podemos ir limpiando y eso no significa no hacer nada, significa que aquello que hagamos sea desde el amor y la paz, dejándonos guiar desde el corazón y no desde nuestros programas, creencias o memorias; no desde el temor.

Si lo que llamamos lucha para un cambio no toca primero nuestros corazones, nada podremos cambiar allá afuera en el mundo. Todo cambio comienza con nosotros mismos. Nuestra lucha comienza con las creencias que nos quitan la paz.

La paz en el país, en la sociedad, en mi medio ambiente comienza con mi propia paz, no hay paz afuera si no la puedo sentir en mi interior. La paz comienza conmigo… y con nadie más.

Todo lo que queremos del afuera lo tenemos que lograr en nuestro interior, con nosotros mismos. No hay otro lugar, las apariencias no son más que proyecciones de nuestro estado interno.

El mundo que vemos es nuestro reflejo. Eso es todo lo que es. Todo, absolutamente todo son experiencias, y depende de nosotros que hacemos con ellas. No hay nada correcto o equivocado, malo o bueno, nosotros somos quienes le damos significado a lo que experimentamos, todo es neutro. El mundo es neutro. Todo es mental. La creencia crea la experiencia.

No podemos hablar de paz si no la sentimos, es algo que quisiéramos tener pero no tomamos la decisión de sentirla y le damos poder a lo externo cuando lo externo es solo el resultado. Lo externo es el efecto de nuestro interior. La causa está en mí.

Cuando nos sintamos completamente en paz, los cambios se darán porque esa es la vibración a la cual estaremos conectados.

Cuando vemos odio en otros, es porque no nos damos cuenta del odio que sentimos, y la única manera de contrarrestarlo es enviando amor a esa situación que nos quita la paz, enviándole amor a nuestra percepción de aquella persona que nos hace sentir mal, asumiendo la responsabilidad por aquello que estamos sintiendo.

Despierta y sueña el sueño que prefieres soñar. La realidad física funciona como un espejo aunque el efecto no se perciba de inmediato. La realidad física es sólo un reflejo de lo que creemos individualmente y de quienes nos rodean que resuenan con nuestra vibración.

El cambio para producirse, debe iniciarse en nosotros para que se vea reflejado en el exterior y no al revés.

Yo soy responsable por todo lo que siento, y está en mí y solo en mí ver el mundo de otra manera. Y esto ocurre cuando transformo las creencias que me quitan la paz.

No necesitamos crear LA VERSIÓN DE LA REALIDAD que queremos, ella ya existe. Funcionamos como una radio, solo tenemos que cambiar de emisora. Todas las estaciones ya están sonando, solo debemos sintonizarnos con esa realidad que preferimos

Te amo.

Jocelyne Ramniceanu

Suscripcion a Gotitas de Jocelyne Ramniceanu

¡¡¡¡Acompáñame en Gotitas, mi nuevo boletín!!!!

Anuncio publicitario

¿Y la culpa?

hibiscus2La mente es una fábrica de preguntas que ella misma no puede contestar pero incansablemente trata de analizar y entre las preguntas que frecuentemente se hace están las siguientes…. ¿Qué hice mal? ¿En qué fallé o en que me equivoqué? o ¿Porque no lo hice de otra manera? Cuando caemos en este tipo de cuestionamientos es porque ya nos estamos sintiendo culpables incluso antes de formularnos la pregunta.

La culpa es un ataque hacia nosotros mismos que proviene de la ira reprimida, de las situaciones que no se tornaron en nuestro favor dejando nuestras expectativas insatisfechas y nos producen rabia, resentimiento, y cuando estas emociones las bloqueamos o no las logramos procesar sanamente y nos las guardamos, nos van carcomiendo internamente. Ellas se van acumulando alimentadas por pensamientos negativos de desvalorización, de lo que nos decimos una y otra vez llevándonos a veces a un sufrimiento excesivo. Nos sentimos indignos y no merecedores.

La culpa se alimenta además de la creencia de ser imperfectos y por eso nos auto criticamos por los errores cometidos,  también se alimenta de la ilusión de estar separados de los demás, y ser merecedores de castigo.

Todo esto es una elaboración mental, es un programa que nos mantiene presos atados a nuestras creencias y nos impide vivir en el presente. Nada de esto es real aunque lo vivamos intensamente.

Puedes preguntarte ¿Que debo de estar creyendo en este momento que me hace sentir así? Y aquello que te venga, suéltalo pero hazlo con amor.

Tú eres un ser perfecto, aunque internamente lo sepas, aparentemente lo has olvidado y llegaste a este mundo a experimentar. Las creencias que elegiste válidas para ti son aquellas que te hacen vivir tus experiencias hasta que las decidas cambiar. La separación es lo que los sentidos y nuestra percepción nos muestran del mundo pero estamos interconectados a niveles que no tenemos ni la remota idea que eso sea posible.

No negamos la responsabilidad personal, esa es la que nos permite experimentar aquello que estamos experimentando pero si podemos entender en otro plano que este mundo es pasajero e inestable donde nada permanece y todo cambia, donde la parte eterna de nosotros no es tocada por las acciones temporales o circunstanciales de nuestra vida o la de otros.

No hay nada que yo te pueda decir para convencerte de tu inocencia mientras trates de entender con la mente, ya que en la mente no existe paz. No vivas en la mente, la mente juzga y te trae sufrimiento, te ata a la ilusión de un pasado que nunca fue real. Vigila tu mente pero hazlo con amor.

La vida es un salón de clase donde tú escoges que deseas aprender, tal vez decidas comprender que la culpa solo existe cuando crees en ella y permitas a la mente llevarte en un viaje lejano al pasado pero te invito a dejar de luchar contra los fantasmas y aceptar que todo lo que existe es el momento presente y sentir que el amor en ti es real. Abandona las trampas de la mente que te quitan la paz zafándote de sus garras, evitando prestarles atención y solo siente. Muchas veces tu cuerpo será el maestro que te devolverá al presente.

Amarte a ti y a otros es perdonar los errores de pensamiento acerca de ti y de otros. Es ser uno con tu ser real. Es vivir desde tu presencia.

El ser verdadero no puede sentirse culpable ni orgulloso, ni exitoso, ni fracasado, tu verdadero ser carece de opiniones y juicios. Conéctate con tu verdadero ser a través de estar presente y reconoce cuando te sientas distraído que permitiste que la mente te maneje, regresa de nuevo, respira profundamente y siente.

Te amo

Jocelyne Ramniceanu

Suscripcion a Gotitas de Jocelyne Ramniceanu

¡¡¡¡Acompáñame en Gotitas, mi nuevo boletín!!!!

¿Soltar o tener el control?

¿Te has sentido alguna vez en plena conexión con todo lo que te rodea y con esa sensación de  inmensa alegría que te recorre todo el cuerpo? Es un placer sentirse de esa manera, son esas veces que nos encontramos libres de nuestro pasado, abiertos a todo lo que llega, en paz y agradecidos.

Ese es nuestro estado natural del ser, ese es el estado donde nos sentimos unidos a todo lo que es, eso es inspiración y todo lo que creamos nos sorprende agradablemente.

Tú tienes acceso a ese estado cuando sueltas tus preocupaciones y dejas de llenarte de ansiedad por el futuro que aun no llega, o por un pasado que ya pasó.

Siempre que hacemos planes nuestra mente se vuelve muy traviesa, ella se entretiene repitiéndonos una y otra vez aquello que debemos hacer, aquello que deberíamos haber hecho y no cesa de decirnos una y otra vez lo que estamos haciendo mal o tal vez bien, con toda clase de razonamientos, escusas, preocupaciones, análisis, acusaciones etc.  Nuestra mente nos atormenta al intentar llevar a cabo nuestros planes, tratando de controlar minuciosamente todo  para que nuestra intención se materialice exactamente  igual a aquello que nos  hemos imaginado.

A veces pasamos largas horas y días planificando algo, y por supuesto no confiamos en que si  tan solo  soltáramos, el resultado sería el mejor posible para nosotros.

No es necesario este desgaste emocional, pero creemos que si no nos hacemos cargo de cada uno de los detalles, las cosas no se solucionan por sí mismas o nadie se va a ocupar de nuestros asuntos, creemos que somos los únicos que podemos tomar las riendas, entonces nos llenamos de estrés, de mal humor, impaciencia y frustración.

Queremos que todo marche acorde con lo planeado para así sentirnos seguros que tenemos el control. El caso es que nunca tenemos el control, no controlamos absolutamente nada, el control no es más que una ilusión.  Lo puedes observar en ti mismo cuando no puedes controlar tu propio cuerpo, tu respiración, los latidos de tu corazón, la circulación de tu sangre, la digestión etc.,  todo esto funciona con su propia inteligencia sin tu intervención,  lo quieras o no. Tampoco puedes controlar tu mente, apenas eres consciente de una ínfima parte de lo que tus sentidos perciben; tu memoria te traiciona, tu conducta y tus emociones muchas veces parecen tener voluntad propia, los pensamientos te obsesionan.

Pero mantenemos la ilusión que tenemos el control y además pretendemos controlar también a otros y a las circunstancias.

No controlamos nada.

¿Te has preguntado qué sucedería si sueltas el control?  Es probable que tengas miedo,… lo que te pido ahora, en este momento es que comiences a soltar y empieces a confiar.

Está bien que tengas  una meta, un deseo, una intencionalidad, y que muevas tus energías hacia un objetivo, que planifiques pero aunque parezca contradictorio, en un momento dado tienes que soltar y confiar.   Una vez creado el impulso deja que siga su camino.

Cuando siembras una semilla, eso es lo que haces, confías, te pones a un lado y  dejas que el sol, la tierra con sus nutrientes  y la lluvia hagan su trabajo, no interfieres,  sabes que ya hiciste tu parte , esperas  y la ves crecer. Tienes la certeza de que así opera la naturaleza

En esencia somos  iguales, cuando te desentiendes de los resultados después de haber enfocado tu intención en un objetivo, ya le distes vida, ya lo impulsaste y el universo se encarga del resto. Siempre el fruto final es el resultado de tu estado mental.

Cuando tratas de controlar los resultados, le estas enviando un mensaje opuesto al universo, le estas indicando que no confías, que dudas acerca de las posibilidades de alcanzar tus metas, y como ya sabes, siempre la vida te da la razón.

Al ir reduciendo tus expectativas la recompensa es una mayor cantidad de milagros, porque la fe y la confianza representan el ángulo en que colocas el arco al disparar tu flecha, y al ponerte a un lado, dejas que tu fuerza creadora se materialice sin la necesidad de tu intervención. La confianza es el ingrediente que da la certeza que tu elección ya está sucediendo en este mismo instante. Si intervienes le estas quitando fuerza.

Cuando te conectas con tu estado puro del ser, te colocas en el presente y por lo tanto  dejas de enfocarte en el resultado, este deja de tener importancia, ya no dudas,  creas y disfrutas del proceso con alegría, sin apegos, creando y co-creando, admirando  y regocijándote con todas tus creaciones.

Cuando te desapegas de las expectativas, ya no te limitas y aquello que surja siempre será lo perfecto para ti.

Si tratas de controlar tus creaciones, ellas estarán impregnadas por tus miedos e inseguridades y eso exactamente es lo que vas a obtener. No hay como creer en tu poder, entonces cuando esto sucede te conectas con todo, te conectas con la vida.

Para lograrlo, tienes que confiar y soltar. La vida es una danza  continua entre tú y tus creaciones, si bailas con ella libremente, todo fluirá con armonía.  Suelta y confía.

Te amo

Jocelyne Ramniceanu

Suscripcion a Gotitas de Jocelyne Ramniceanu

¡¡¡¡Acompáñame en Gotitas, mi nuevo boletín!!!!

Cero, el estado perfecto.

Queridos amigos hoy quiero compartir con ustedes lo que es estar en el estado Cero. Los budistas lo llaman el vacio y Shakespeare lo define como ser igual a una página en blanco. Joe Vitale junto con el Dr.Ihaleakala Hew Len lo llamaron Zero Limits en el libro que realizaron conjuntamente.

Para comprenderlo mejor tenemos que remontarnos a la primera vez que fuimos creados, en ese entonces no poseíamos información, nos encontrábamos en el paraíso o el Edén, no teníamos ni juicios ni opiniones, no existía lo bueno ni lo malo, lo feo ni lo bonito, todo era perfecto hasta que comenzamos a pensar,  asi llegamos al mundo hace ya muchas vidas atrás, tal vez cientos  o miles, quien sabe. El Dios que está en nosotros nos creo perfectos.

A lo largo de todas nuestras experiencias pasadas hemos ido recogiendo informaciones que se fueron alojando en nuestro subconsciente, en  nuestras células y las hemos traido con nosotros  de generacion en generación, de vida tras vida hasta el momento presente.

Fuimos construyendo creencias y juicios de lo que debía y no debía ser y las hemos compartido y enseñado. A lo largo del tiempo hemos ido acumulando mas y mas información y la hemos ido adaptando a nuestra vida sin darnos cuenta que la vida que hemos vivido, no ha sido mas que el reflejo o la manifestación de todo lo que acumulamos en nuestra mente, el mundo que vemos ahora es únicamente el espejo de nuestro interior. Hemos creado un universo en torno a nuestras experiencias, nuestros pensamientos, nuestros temores y nuestros deseos, y eso es lo que estamos manifestando.

Asi surgieron los problemas, que no son otra cosa que la ignorancia de saber quienes en realidad somos .Ellos aparecen desde el momento que comenzamos a identificarnos con lo que creemos, con nuestras profesiones, con nuestros roles , con nuestro aspecto, nuestra nacionalidad o nuestro partido político, mas nosotros no somos nada de esto. Somos perfectos pero no lo sabemos porque no lo podemos experimentar ya que  ignoramos nuestra verdadera identidad.

El estado Cero es el estado al que llegamos cuando comenzamos a limpiar nuestras memorias, es el estado previo a la inspiración. Mientras estamos absortos tratando de resolver los desafíos de la vida, no tenemos acceso a la información correcta, entonces no somos creativos, porque la inspiración esta bloqueada  por nuestras memorias. Estar en estado Cero es estar abierto a ser inspirado, es estar claro con nuestra naturaleza divina, y es estar fluyendo con la correcta información.

Cuando limpiamos nuestras memorias, cuando sanamos nuestro pasado, nos convertimos en una hoja en blanco y solo entonces es cuando podemos sentir paz y armonía  y llegar a lo que algunos maestros llaman la iluminación. Estar en estado Cero es estar listo para recibir y crear lo que es correcto y perfecto para nosotros.

Te amo

Jocelyne Ramniceanu

 

Suscripcion a Gotitas de Jocelyne Ramniceanu

¡¡¡¡Acompáñame en Gotitas, mi nuevo boletín!!!!

Atrapados en las emociones

Hay días que nos dejamos llevar por nuestras emociones cuando un suceso aparente se desencadena,(una noticia en la televisión, el jefe que nos grita, un amigo que nos hace un desaire, o el presidente que anuncia nuevas medidas)  entonces  lo tomamos como una supuesta amenaza al ser que creemos ser, una amenaza a aquello que  pensamos que es correcto  según nuestras creencias, o un ataque a nuestros  valores, a nuestras expectativas  y por ende se desata en nosotros una furia  que a  veces es de  grandes proporciones  y que nos quita inmediatamente la paz. Estas situaciones nos llevan a defender nuestros llamados intereses de manera  incluso a veces violenta para salvaguardarnos  del supuesto atacante perdiendo cualquier vestigio de tranquilidad. Estas son las emociones a las cuales muchos estamos adictos y no notamos que somos nosotros quienes creamos toda la situación desde nuestra percepción de los hechos.

Este es el mundo que solemos ver cuando andamos dormidos e inconscientes, nos entregamos a alimentar la chispa participando activamente en la obra que nosotros mismos hemos creado. Reaccionamos ante cualquier evento sin darnos cuenta que hemos emitido un juicio y por eso explotamos.

Creemos que la amenaza es real y esta se encuentra en el mundo que proyectamos. Nada nos puede amenazar a menos que asi  lo creamos, entonces vivimos las experiencias como un reflejo de nuestro mundo interno, nuestros temores y del mundo que hemos decidido creer y por lo tanto así lo estamos creando, estamos creando una realidad  que podría ser diferente con solo cambiar nuestro enfoque. Nos mantenemos atrapados en nuestros pensamientos o preocupaciones.

Nuestros temores también son aprendidos, no llegamos al mundo con ellos y lo podemos constatar en los niños muy pequeños que andan libremente confiados. Mientras no nos deshagamos de nuestros temores, nos seguirán produciendo emociones desagradables hasta que decidamos cambiar nuestra percepción, y es entonces cuando el universo nos recompensará.

Las emociones, por lo general están asociadas a cargas energéticas atrapadas de situaciones viejas que se hace necesario liberarlas.

Para sanar nuestras emociones tenemos que prestarles atención y evitar reaccionar, ya que la reacción es la leña que aviva el fuego, alimenta aquello que no deseamos. Por otro lado es útil señalar que todo desaire, toda agresión, toda emoción de vibración densa puede esfumarse al cambiar nuestro enfoque hacia el amor.

No olvidemos que es natural sentir dolor pero el sufrimiento es opcional.

¿Como evitamos reaccionar?

Tomando consciencia  que estamos viviendo dentro de una ilusión. Observando a menudo nuestros pensamientos de manera imparcial sin engancharnos, tan solo dejándolos pasar, e incluso nos podemos reír de ellos por su falta de veracidad. Eso ayuda a tomar la distancia necesaria. Permanecer centrados en el presente, sin divagar y darnos cuenta cuando lo hacemos para regresar al momento actual, vivir atentos y acostumbrarnos a la auto observación.

Enfrentar nuestros temores, con confianza y traerlos a la luz. Todos podemos cambiar las creencias limitantes por creencias expansivas de amor y paz, solo tenemos que darnos el premiso. Permitir es la clave, soltamos nuestra rigidez de ideas.

Cuando nos vemos envueltos en una situación tomemos la decisión de soltar. Esa es la otra clave, el asunto no se trata de ti, se trata de lo que tú crees que eres. Suelta, no pasa nada y todo estará bien. Cuando no te enganchas sales ganando sin importar la justificación.

Una vez que ya hemos reaccionado y que estamos sintiendo los efectos psicofísicos de la emoción, podemos regresar a la calma bastante rápido, con solo ocupar nuestra mente en palabras como TE AMO, GRACIAS, LO SIENTO, PERDONAME o cualquier otra que venga de nuestra  inspiración, repitiéndolo continuamente como un mantra y soltando la experiencia pasada. También podemos realizar la respiración HA, explicada en un artículo pasado .Y si tu cuerpo te lo está pidiendo, descansa, siempre escucha lo que tu cuerpo te dice, préstale atención, el también te habla.

La meditación y el uso del Ho’oponopono son herramientas que no debemos excluir para obtener paz. Lo que borramos con Ho’oponopono no es el mundo que vemos sino el juicio y la opinión que va ligada a lo que experimentamos. Con él limpiamos los juicios de valor, ya que nada tiene el significado que usualmente le damos.

Las emociones que llamamos negativas, porque nos hacen sufrir están allí para avisarnos que estamos percibiendo erróneamente. Ellas son un llamado de atención desde nuestro cuerpo y nuestra mente para que transformemos nuestras creencias. Siempre que te sientas mal, tómalo como un aviso que algo hay en tu sistema mente/cuerpo que debe ser corregido. Esto es válido con las enfermedades también ya que ellas cumplen la misma función de avisar  y  mentalmente puedes agradecer porque vienen a ti como oportunidades para enmendar.

Cuando pasamos el switche y decidimos sentir amor, porque se trata de una decisión,  y cedemos nuestra postura por una más comprensiva, una actitud amorosa, todo el nudo energético que estábamos experimentando, se desvanece mágicamente y el mundo se transforma.

El mundo es solo un reflejo de lo que pensamos. Nosotros no percibimos la realidad tal como es, lo que vemos siempre está teñido por la película que se desarrolla en nuestra mente, no tenemos ni siquiera idea de lo que realmente está sucediendo. Lo que percibimos es una ilusión y hablamos, actuamos y pensamos de acuerdo a nuestras representaciones subconscientes.

Es tan natural sentirnos victimas y así evitar la responsabilidad de poner en duda nuestras creencias y  de cómo nos sentimos con respecto a ellas que colocamos fuera de nosotros al villano, ya sea un mal jefe, un conyugue, socio o incluso algún político o presidente. Entonces nuestro mal-estar queda bien justificado.

Lo que no nos damos cuenta es que si nosotros encontramos la manera de estar en paz, nuestro mundo también se transforma. Tenemos el poder individual de transformar el mundo que vemos pero nos mantenemos adictos a reaccionar y a evitarnos.

No te tomes nada personalmente, ningún hechizo puede afectarte a menos que tú lo permitas.

Puedes hablarle a tu cuerpo o a tu mente, ya sea por una enfermedad o por que deseas cambiar tus creencias, puedes usar un péndulo para averiguar las creencias subconscientes que te limitan, obteniendo respuestas afirmativas o negativas. Hay un abanico de posibilidades y puedes usar la técnica EFT que en otra oportunidad escribiré acerca de ella, para liberar tus bloqueos.

He oído decir que estar en paz es aburrido, yo también en algún momento pase por esa idea, pero cuando conoces la serenidad y sabes lo bien que se siente, es el paraíso terrenal y es así que fluyen fácilmente los sentimientos de amor por todo lo que nos rodea sin excepción.

Todo se trata de una decisión, si tomamos la decisión de mantenernos  conscientemente en paz, inmediatamente hallaremos los medios para lograrlo. Usemos nuestras emociones como la brújula para indicarnos el camino a seguir. El amor es el camino.

Te amo

Jocelyne Ramniceanu

Suscripcion a Gotitas de Jocelyne Ramniceanu

Viviendo en inspiración

En un taller que dicté recientemente, pude notar cuan difícil se nos hace  identificar de donde viene la información que llega a nuestra mente, si llega desde la inspiración o de nuestras memorias en el subconsciente.

Por lo general el 99 % de nuestros pensamientos y todo lo que hablamos viene de los datos que almacenamos, también cuando escuchamos hacemos lo mismo, inmediatamente lo comparamos, lo analizamos y lo archivamos. Casi todo lo que hacemos es asimilar y almacenar información vieja que la reordenamos una y otra vez ajustándola a nuestras creencias para volverla a usar. La reciclamos  constantemente sin darnos cuenta que allí no hay nada nuevo porque vivimos sumergidos en el pasado o en el futuro, y muy poco en el presente. Lo que hacemos es observar lo mismo puesto de otra manera.

En nuestro subconsciente están todos los recuerdos de todo lo vivido desde que fuimos creados hasta la fecha, los olores, los sabores, las imágenes, los sonidos y las sensaciones. Allí se encuentran  nuestras expectativas, nuestros miedos,  y las creencias. También el subconsciente es quien se hace cargo del funcionamiento de nuestro cuerpo, del sueño, de las emociones y es el responsable de manifestar  lo que experimentamos en nuestra realidad. Nuestra parte consciente, la que se da cuenta, su única función es  elegir, es ella quien decide, es para eso que fue creada y para nada más. Ella selecciona que dato de nuestros discos va a tocar en ese momento, toma la información de nuestra biblioteca interior y actúa en base a ella. También puede elegir contactar nuestra parte divina si presta atención, si logra aquietar el parloteo mental.

La información que entra a nuestra consciencia o intelecto, generalmente  proviene de nuestras memorias, y muy raras veces viene de inspiración. Cuando llega por inspiración, lo podemos reconocer porque a veces  se nos presenta en forma de idea, de algo nuevo y  es cuando decimos Eureka!!!! o WAW!!! Y nos alegramos porque son las respuestas a las preguntas que no lográbamos  encontrar o es la solución a aquellos problemas, que no podíamos solucionar.

Esta información nos viene  de nuestra conexión con Dios, no está almacenada en nuestros recuerdos, no proviene de nuestro pasado  ni de nuestras experiencias. Llega cuando nos ponemos a un lado y dejamos de interferir. La inspiración aparece cuando dejamos a Dios actuar, aceptamos que no sabemos y soltamos. Viene cuando dejamos de pensar y estamos tranquilos. La inspiración aparece cuando limpiamos nuestras memorias diciéndoles, Gracias, Gracias, Gracias.

Todas las respuestas están en nuestro interior, pero nosotros hacemos mucho ruido y no las escuchamos, la información correcta siempre está allí, hablándonos y solo tenemos que hacer silencio. Confía, tranquilízate y borra, entonces allí es cuando aparecerán las respuestas a todas tus inquietudes.

Te amo

Jocelyne Ramniceanu

¿Estar separados es una ilusión?

Mientras me  preguntaba acerca del tema a desarrollar en el blog y me cuestionaba acerca de que escribir y lo que les podría interesar, observe mis divagaciones  y me di cuenta de la manera como me proyecto en ustedes, como caigo en la ilusión de sentirme separada del mundo, que somos entes distintos y me descubro buscando aprobación o reafirmando mi identidad a través del mundo que percibo.

Para mantenerme separada del mundo que veo y bien diferenciada, proyecto en ti todo lo que no apruebo en mí o desconozco en mi todo lo que admiro de ti (Así mantengo la ilusión de la separación). Si lo puedo ver  afuera es porque forma  parte de mí. Nosotros no podemos reconocer lo que no conocemos.

Por otro lado están los sentidos físicos, ellos también nos despistan, muestran una realidad del mundo idéntica a lo que la mente ordena, aunque tenemos la ilusión que primero observamos lo que nos rodea y luego lo interpretamos, no es así, y esta ilusión se debe a que  muy pocos procesos ocurren a nivel consciente En realidad lo que sucede es lo opuesto, la mente es quien dirige las manifestaciones que nuestros sentidos experimentan. Esto ocurre simultáneamente, la causa y el efecto están unidos y por esta razón creemos que las cosas nos suceden y no que las estemos causando. Nosotros no vemos el mundo tal y como es, lo vemos a través del significado que le damos.

Uno de los preceptos del Ho’oponopono dice “No existe nada afuera”, entonces me he preguntado, ¿Y quienes son ustedes?  Comprendo que es imposible saber quiénes son ustedes porque ignoro quien realmente soy.

Yo no los veo con la visión interna, los veo a través de mis creencias, de mis juicios, de mis conceptos, de mi experiencia y de mis sentidos que no me muestran la realidad tal y como es. Para poder saber quiénes son ustedes primero tengo que descubrir quién soy yo, de lo contrario siempre serán mi proyección.

Luego me pregunto, ¿somos todos uno? ¿Es la separación una ilusión?

Estoy segura que sí, pero aun sigo en el mundo de la ilusión, aun estoy programada  y el antídoto para despertar es el amor.

Nosotros venimos de la fuente, y nunca fuimos separados de ella. Por lo tanto somos parte de ella. Somos creadores.

Aun sabiendo que tu eres mi espejo. mi querido amigo, eres igual a mí, eres parte de mí y a ti te hablo, de manera  similar al dialogo que a veces suelo sostener dentro de mi mente, con las partes de mi cuando no estamos del todo unificadas. Te digo que podemos volver a sentirnos como uno, solo a través del amor y la paz.

Y entre las cosas que te digo, o me digo, es igual…, y es, vamos……, usa tu poder creador y asume que tu eres la fuente. Puedes cambiar todo lo que manifiestas.

No te olvides, TU ERES LA FUENTE. Todo lo estas creando TU con tu mente, no hay nada afuera, todo es una proyección, todos somos facetas de un mismo y único todo y lo único que tenemos que hacer es cambiar nuestra percepción, NO estamos separados, y la única manera de percibirlo es cuando regresemos al amor.

Te amo

Jocelyne Ramniceanu .

No sé nada

Mi deseo a través de mis palabras, para todos, para ti, incluso para mi, es que nos volvamos a conectar con la fuente . . . Volvamos a ser humildes para dejarnos guiar.
No sabemos más que Dios lo que es bueno para nosotros, no tenemos ni idea . . . si nos dejamos guiar, y soltamos esa parte nuestra que dice saber más que nadie o que dice «¡yo tengo la razón!» ó «¡yo tengo la verdad!» ó «¡yo sé lo que tú debes o no debes hacer, decir o pensar!», no saldré de mis programas, seguiré repitiendo las mismas pautas de mi pasado y no podre oír las señales que Dios me manda.

Mis pensamientos hacen ruido, y para oír a Dios, tengo que prestar atención, aquietar mi mente y decir para mis adentros: «gracias, gracias, gracias, . . .»  hasta que no quede nada, sólo el vacío.
Así podré oír . . . existe un sinfín de bendiciones, cuando callo mi mente, y un mar de posibilidades de donde escoger, dejo de ser prisionera de mis memorias. Si acepto que no sé, estoy abierta a las señales, entonces solo vendrán a mi vida nuevas experiencias, nuevas ideas, nuevas relaciones, nuevas oportunidades . .  . Aprendamos a calmar nuestra mente, digamos: «gracias, gracias, gracias, gracias,  . . .» hasta que calmemos nuestros pensamientos.
Tu mayor sabiduría es cuando reconoces: «¡Sólo sé que no sé nada!» Y busca, dentro de ti están las respuestas.

Los amo

Jocelyne Ramniceanu

Los Pensamientos

Los pensamientos negativos son oportunidades por muy desagradables que algunos parezcan, y si los borramos a tiempo, podemos evitar que se manifiesten  en nuestras vidas. Los pensamientos están casi siempre impregnados de memorias y nuestra mente se sigue programando a sí misma constantemente, instante a instante . . . sin cesar. En cada segundo la estamos programando y re-programando con esos mismos  pensamientos antiguos.

Si mis creencias me llevan a pensar que la vida es muy desagradable, que es injusta, que hay mucho sufrimiento, mucho dolor . . . ese pensamiento le está dando forma a mi realidad, le da una orden a mi mente y mi mente le está dando una orden a el universo. Lo que estoy haciendo es creando mi realidad, que a su vez va a confirmar mi creencia de que la vida es dolorosa y está llena de sufrimiento. Hacer cambios en nuestros patrones de pensamiento no es imposible. La buena noticia es que practicando el Ho’oponopono si los podemos cambiar.

Cuando nos encontramos con pensamientos dolorosos, de sufrimiento, podemos decirnos  a nosotros mismos, gracias, gracias (les agradecemos mostrarse y brindarnos la oportunidad de borrarlos) y luego amarlos. Tan solo con decirles «Te amo» los estamos liberando y liberamos la energía que va con ellos asociada, transmutando las sensaciones desagradables que nos estaban  ocasionando malestar en pura paz. Cuando les decimos Gracias, Te Amo, no nos aferramos a ellos, los dejamos ser, dejamos de prestarles atención y por ende tienden a desaparecer y dejan de manifestarse en nuestra realidad.

Estas palabras son mágicas, cuando las empleamos constantemente. Todo se transforma. La constancia es necesaria para realizar los cambios. No olvidemos que nuestra mente se programa a cada instante y tenemos programaciones muy antiguas, incluso muchas vienen desde nuestros ancestros.

Tener paz es una opción y es únicamente nuestra elección y nuestra decisión, no lo olvidemos, de nadie más. La paz es nuestro estado natural.

Un abrazo,

Jocelyne Ramniceanu

Nube de etiquetas